Un pastelito de queso y limón.
El desayuno proteico, saludable y bajo en grasas más fácil del mundo: en solo 2 minutos y con 3 ingredientes
Con solo 3 ingredientes, es la opción perfecta para quienes desean un impulso rápido de energía y vitalidad sin complicaciones.
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Son cada vez más las personas que piensan en hacerse cada mañana un desayuno proteico para así poder llegar a conseguir sus objetivos a nivel físico y afrontar la jornada con más energía, pero habitualmente se piensa que su preparación requiere de mucho tiempo y esfuerzo.
Sin embargo, la realidad es que existe una receta rica en proteínas, calcio y vitamina D que se compone de solo tres ingredientes y que puedes preparar en apenas un par de minutos. Se trata de un plato perfecto para iniciar la jornada y contar con suficiente energía para todo el día.
Nuestra recomendación es elaborar unos pastelitos de queso y limón sin azúcar, un desayuno nutritivo, delicioso y sencillo de preparar, para el cual apenas se necesitan 125 gramos de queso fresco, unas cucharadas de jugo de limón y un huevo.
No obstante, si lo prefieres, puedes agregar ingredientes adicionales, como esencia de vainilla o cualquier otro saborizante para enriquecer su sabor, frutos secos, frutas frescas o edulcorante apto para cocción para darle un toque dulce sin agregar azúcar.
Ingredientes de los pastelitos de queso y limón sin azúcar
- 1 huevo
- 150 g de queso fresco
- Jugo de 1 limón
- Ingredientes adicionales opcionales (frutas frescas, frutos secos, etc.)
Paso 1
En un bol, agrega el huevo, el queso fresco y el jugo de limón. Mezcla bien hasta conseguir una preparación homogénea y sin grumos. Si deseas, añade ingredientes adicionales como frutas frescas o frutos secos.
Paso 2
Vierte la mezcla en un recipiente apto para microondas, asegurándote de no llenarlo completamente.
Paso 3
Cocina a máxima potencia durante 2 minutos.
Paso 4
Deja enfriar brevemente antes de servir.
Beneficios de los desayunos proteicos
El desayuno es la comida más importante del día. Después de una larga noche de ayuno, el cuerpo necesita ingerir alimentos que le permitan recuperar energía. Sin embargo, a pesar de su importancia, hay quienes, principalmente por prisa, no le dan la atención que merece.
Algunos piensan que saltándose el desayuno pueden perder peso más rápido, pero esto es un error. No desayunar tiene consecuencias. Una de ellas es el hambre entre horas, lo que aumenta la probabilidad de picar comida poco saludable. Además, al no desayunar, se experimenta una falta de energía y somnolencia durante toda la mañana, lo que puede afectar el rendimiento.
También se disparan los niveles de glucosa en sangre, aumentando la sensación de apetito, ansiedad y estrés. Esto puede llevar a cambios de humor, debilitar el sistema inmunitario y afectar la digestión, causando estreñimiento. A largo plazo, también puede incrementar el riesgo de enfermedades cardíacas.
Una vez que se es consciente de la importancia del desayuno, es relevante hablar sobre los desayunos proteicos. Estos son una excelente fuente de energía y vitalidad. Sin embargo, es importante no excederse en el consumo de proteínas, ya que el cuerpo no puede almacenarlas y acaban convirtiéndose en grasa.
Los desayunos proteicos destacan por contener alimentos ricos en proteínas, que ofrecen múltiples beneficios para la salud, entre los que se encuentran los siguientes:
- Reducen la ansiedad por la comida: los desayunos proteicos mantienen una sensación de saciedad durante un periodo mayor de tiempo, lo que reduce la ansiedad por la comida y, por tanto, el hecho de picar entre horas.
- Aporte de energía: desayunar proteínas contribuye a poder disfrutar de la energía necesaria para afrontar toda la jornada, al mismo tiempo que ayuda a regenerar la masa muscular.
- Reduce el colesterol: un desayuno proteico favorece la reducción de los niveles de colesterol malo, así como de la acumulación de grasas en el cuerpo.
- Refuerza el sistema inmunológico: este tipo de desayunos son una buena opción para reforzar y fortalecer el sistema inmunológico, al mismo tiempo que reduce el riesgo de padecer enfermedades cardíacas:
Reparación de tejidos: Las proteínas ingeridas ayudan a la hora de formar y reparar los tejidos de las uñas, los músculos, los huesos y el cabello. - Mejora la concentración y la memoria: mantener unos niveles altos de energía hará que durante toda la jornada se tenga menos cansancio, mejorando los estados de alerta, memoria y concentración.
Estas son solo algunas de las numerosas ventajas asociadas a los desayunos proteicos, en los que, además de preparar estos pastelitos de queso y limón, puedes añadir otros alimentos ricos en proteínas como un vaso de leche desnatada con copos de avena, un yogur griego, una tortilla y un poco de pechuga de pavo, sin olvidar otros como la quinoa, el atún o el aguacate.
