El parque nacional menos visitado en Estados Unidos que solo los verdaderos aventureros se atreverían a visitar

El Parque Nacional y Reserva Puertas del Ártico, en Alaska, es el menos visitado de todos, con solo 11,907 visitas recreativas en 2024, lo que lo convierte en un destino ideal para aquellos que buscan escapar de las multitudes y sumergirse en la naturaleza más pura.

Este parque, ubicado en la región más remota de Alaska, abarca más de 8.4 millones de acres y se encuentra dentro del Círculo Polar Ártico, un área casi inexplorada por el ser humano. Ofrece una experiencia de naturaleza salvaje sin igual, donde los visitantes deben estar preparados para la autosuficiencia total: no hay caminos ni senderos establecidos, no hay cobertura celular ni campamentos tradicionales.

Para los aventureros que aceptan el desafío, el parque promete una conexión única con el entorno más natural que se pueda encontrar en los EE. UU.

El Parque Nacional y Reserva Puertas del Ártico no solo es un lugar para explorar, sino también un refugio para la vida silvestre. Aquí habitan especies como osos grizzly, caribúes, lobos y más de 150 especies de aves.

Además de ser un paraíso para los amantes de la fauna, el parque ofrece una geografía impresionante, con montañas escarpadas y vastas tundras cubiertas por una flora resistente que sobrevive en un clima extremadamente frío. Es un lugar donde la historia cultural se mezcla con la belleza de la naturaleza, convirtiéndolo en un destino fascinante para los viajeros que buscan más que solo paisajes.

¿Por qué el Parque Nacional Puertas del Ártico es tan inaccesible?

El Parque Nacional Puertas del Ártico es un lugar verdaderamente remoto. No cuenta con carreteras que lo conecten con el resto del mundo, por lo que los visitantes deben acceder a él mediante aeronaves chárter o, para los más aventureros, caminando o navegando en canoa desde la Dalton Highway.

Esta falta de infraestructura, aunque representa un desafío, es precisamente lo que lo convierte en un destino tan exclusivo. Aquí, los viajeros pueden disfrutar de una experiencia de naturaleza virgen, alejada de las multitudes y de los complejos turísticos que suelen abarrotar otros parques nacionales más populares, como el Gran Cañón o Zion.

Además, el parque enfrenta temperaturas extremadamente bajas en invierno, que pueden caer por debajo de los -40 °C, y veranos muy breves, donde las temperaturas rara vez superan los 20 °C. La temporada de mosquitos también puede ser un obstáculo, especialmente a principios de verano, lo que agrega un reto adicional para quienes se atrevan a explorarlo.

Actividades y atracciones del Parque Nacional Puertas del Ártico

Aunque no cuenta con senderos tradicionales, Puertas del Ártico ofrece una libertad única para los excursionistas más experimentados. Los visitantes pueden recorrer el parque a su ritmo, explorando sus vastas extensiones sin las limitaciones de los senderos marcados. Sin embargo, debido a la naturaleza salvaje del lugar, se recomienda que los excursionistas tengan experiencia en senderismo de alta montaña y navegación en terrenos difíciles.

Durante el invierno, actividades como el esquí de fondo, la raqueta de nieve y el mushing (trineos tirados por perros) son populares. También es un destino perfecto para los amantes de la fotografía, con vistas impresionantes y una vida silvestre espectacular que ofrece oportunidades únicas para capturar la belleza del Ártico.

Cómo planificar tu visita

Debido a su aislamiento, visitar el Parque Nacional y Reserva Puertas del Ártico requiere una planificación cuidadosa. No existen servicios públicos ni campamentos establecidos, por lo que los viajeros deben ser completamente autosuficientes y estar preparados para enfrentar condiciones extremas. Es fundamental llevar suficiente equipo de seguridad, conocer primeros auxilios y estar al tanto de las pautas de conservación del parque para preservar su integridad.