Ciudadanos protestan ante Tesla por las acciones realizadas por Elon Musk.

Ciudadanos protestan ante Tesla por las acciones realizadas por Elon Musk. Europa Press

Motor

Tesla, atrapada entre el 'efecto joroba' y el 'componente Trump': por qué sus ventas se desploman un 70% en España

Las desafortunadas acciones de Musk y la devaluación de los coches, entre las principales razones.

Más información. Surgen las primeras grietas entre Elon Musk y Donald Trump

Publicada

Tesla no vive sus mejores momentos. Las ventas de coches eléctricos de la marca de Elon Musk cayeron en 2024 un 1%, con un total de 1,79 millones de vehículos vendidos en todo el mundo.

Si bien la caída mundial no es excesivamente elevada, cuando se analizan las ventas en Europa el dato sí es más preocupante. Buena prueba de ello es que Tesla matriculó un total de 243.000 coches en el Viejo Continente durante el pasado ejercicio, lo que supone una caída de algo más del 13%.

En cuanto al mercado español, durante el pasado año el total de matriculaciones fue de 16.700 unidades, lo que implica una ligera subida del 1,6%. Sin embargo, cuando se analizan los últimos datos, comprobamos que en enero la caída de Tesla ha sido del 77%. En lo que llevamos de febrero, la bajada es del 42%.

Pero, ¿qué le está pasando a Tesla? ¿Por qué han caído tanto sus ventas en los últimos meses?

Una serie de preguntas que probablemente no tengan una sola respuesta, sino que sea un conjunto de razones, ocurridas principalmente en los últimos meses, las que expliquen la reacción negativa del mercado.

El temido efecto Osborne

Y en este sentido, uno de los aspectos que coincide en el tiempo con estos malos resultados de Tesla es que la marca de Elon Musk ha presentado el nuevo Tesla Model Y. Esto ha hecho que las ventas del Tesla Model Y actual decaigan por completo.

Es lo que en el automóvil, y en general en el mundo de los negocios, se conoce como el efecto Osborne. Se trata de un fenómeno por el que una empresa perjudica sus propias ventas al anunciar prematuramente un nuevo producto antes de que esté disponible.

Si bien es cierto que Tesla en realidad no anunció la llegada de un nuevo Model Y hasta hace solo unos días, también hay que reconocer que las numerosas filtraciones que ha habido han hecho que un gran número de posibles compradores conocieran la próxima llegada de la nueva versión durante 2025. Y de ahí que parasen las ventas del Model Y en 2024 y principios de este año.

En el siguiente gráfico se puede ver claramente la aplicación de este efecto Osborne. Comenzando por el Tesla Model 3, la gráfica roja, las ventas iban subiendo hasta el año 2021 y 2022, cuando permanecieron planas.

Esa parálisis coincide con la comunicación de que la compañía estaba preparando la actualización del Tesla Model 3 que llegaría un año más tarde, en 2023. De ahí que las ventas estuvieran retenidas hasta ese año, que fue cuando mostraron sus mejores números, al igual que en 2024.

Y algo similar ha ocurrido con el Tesla Model Y. En España las ventas crecieron en 2022 y 2023, sin embargo, descendieron en 2024.

El efecto Trump

Otro aspecto que ha podido influir en la bajada de las ventas de Tesla es el reciente posicionamiento de su CEO, Elon Musk, junto a Donald Trump, actual presidente de Estados Unidos.

Muchas de las personas que en su día depositaron su confianza en el fabricante de coches eléctricos lo hicieron precisamente por la filosofía de su fundador, que buscaba un cambio radical en la industria del automóvil hacia una movilidad eficiente.

Sin embargo, en los últimos años Tesla parece detenida y sin grandes avances, mientras que Musk se ha dedicado a poner grandes esfuerzos en comprar y cambiar la red social X (antes Twitter) y en formar parte del Gobierno de Trump, con responsabilidades sobre la eficiencia de su Administración.

Durante este tiempo, Musk apenas ha profundizado en la llegada de nuevos modelos de Tesla. Es cierto, en este sentido, que el CEO de la compañía ha anunciado un modelo más pequeño que el Model 3, pero sigue siendo una gama pequeña respecto a otros competidores.

De hecho, son varios ya las marcas que cuentan con más modelos 100% eléctricos que Tesla. Y todavía más los que atacan segmentos donde no está la marca estadounidense. De ahí que las ventas también se vean afectadas.

En este sentido, Tesla cuenta hoy con cuatro coches eléctricos puros. Y otras compañías como BYD, por ejemplo, ya dispone del doble de eléctricos, con un total de ocho modelos.

Elon Musk generó una gran polémica por levantar el brazo hacia el público en el acto de Trump como nuevo presidente.

Elon Musk generó una gran polémica por levantar el brazo hacia el público en el acto de Trump como nuevo presidente. Europa Press

Otras firmas como BMW también cuentan con más vehículos eléctricos que Tesla, al tener también ocho modelos. Y respecto a grupos como Volkswagen la oferta ya supera la decena,

A todo ello hay que sumar algunos movimientos desafortunados que Elon Musk ha realizado en sus intervenciones, como el saludo al público con el brazo levantado señalando que les 'entregaba su corazón'. A ello hay que sumar su apoyo al partido alemán de ultraderecha, AfD. Ambos hechos han provocado que su imagen haya empeorado en Europa.

Menor fidelidad

Otro aspecto que también puede influir en el hecho de que Tesla se encuentre en esta situación es que muchos de los compradores que en su día optaron por la compañía no repiten con la marca.

Son varias las fuentes que comentan a EL ESPAÑOL que los clientes que eligieron en 2019 o 2020 un Tesla Model 3 y que ahora, al cabo de cinco o seis años, quieren cambiar de coche, no se están planteando la compra de un Tesla.

¿La razón? Pues las numerosas acciones que ha realizado la compañía y que han penalizado su imagen. Una de ellas es la de bajar el precio de los coches, lo que ha hecho perder los valores residuales (lo que vale el coche pasado unos años) caigan.

A la izquierda el anterior Tesla Model Y, a la derecha el nuevo.

A la izquierda el anterior Tesla Model Y, a la derecha el nuevo. José Luis Cano

Y hacer que los residuales bajen es una de las "peores cosas que le puede ocurrir a un fabricante de automóviles", señalan algunas fuentes de la industria del automóvil a EL ESPAÑOL.

Entre otras razones porque si el propio fabricante deprecia el valor del coche, tanto los particulares como las flotas que adquieran este vehículo verán como sus activos pierden valor de un día para otro.

A ello también hay que sumar que Tesla no es una de las marcas que más se caracteriza por su fiabilidad. Buena prueba de ello son los índices de J.D. Power, que cuantifica los problemas de los principales fabricantes por cada 100 vehículos y en los que la marca estadounidense se ha situado entre las últimas posiciones, al registrar más problemas que otros fabricantes.

Por el contrario, encuestas de compañías como Consumer Reports en 2024, señalaban que el 72% de los propietarios de Tesla indicaron que volverían a comprar un vehículo fabricado por la empresa de Elon Musk, a pesar de que fue clasificada como la sexta marca menos fiable de las 22 evaluadas.

En definitiva, una controversia más -la de la fiabilidad- que se suma a los otros tantos retos que está viviendo la compañía y que no se traducen precisamente en una mayor certidumbre respecto a las ventas.

Pendientes del barco

Y por último, otro aspecto que también llama la atención en esta compañía es que, en el caso del mercado nacional, las matriculaciones dependen mucho de la llegada de los coches por barco a los puertos españoles.

En este sentido, por ejemplo, hay meses en los que Tesla consigue una gran cuota de mercado porque acaba de llegar un barco con muchos modelos para matricular. Y, sin embargo, al mes siguiente, si no ha llegado un nuevo barco, las matriculaciones caen de forma cuantiosa.