Calles de piedra de uno de los pueblos más bonitos de España, Anento.
Uno de los pueblos medievales más bonitos de España con un secreto mágico: perfecto para escaparse en Semana Santa
Descubre por ti mismo por qué este rincón está declarado como uno de los "Pueblos Más Bonitos de España" desde 2015.
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Con la llegada del buen tiempo y los días más largos, buscar escapadas que nos alejen de lo cotidiano y poder disfrutar de las maravillas que esconde España, es la pasión de muchos. Más ahora, que se acerca algunos de los días festivos más esperados por muchos, la Semana Santa.
En este caso, dirigimos la mirada hacia la provincia de Zaragoza, a Anento, un pintoresco pueblo ubicado en la comarca del Campo de Daroca. Se trata de un destino que combina historia, belleza natural y una atmósfera auténtica.
Considerado uno de los pueblos más bonitos de España desde 2015, este lugar no solo es perfecto para desconectar, sino que guarda uno de los secretos naturales más impresionantes de la región: el Aguallueve, un manantial de aguas cristalinas que atrae a miles de visitantes cada año.
Un pueblo medieval con un secreto único
Anento es un pequeño pueblo que, con apenas 100 habitantes, se distingue por su arquitectura medieval, donde sus calles estrechas y empedradas te transportan al pasado.
Las casas de piedra, con tonalidades cálidas de ocres y rojizos, crean una atmósfera acogedora y pintoresca que invita a perderse entre sus laberintos de callejuelas. El cuidado en la conservación de su patrimonio le ha permitido ser incluido en la lista de los "Pueblos Más Bonitos de España".
Laguna de Aguallueve en Anento, Zaragoza.
En el Aguallueve, la naturaleza se muestra en su máxima expresión. Sus aguas fluyen entre formaciones rocosas cubiertas de musgo, helechos y plantas como la menta. Durante el invierno, el frío transforma las aguas en impresionantes estalactitas de hielo, creando una imagen mágica que atrae a los amantes de la naturaleza y la fotografía.
Senderismo en el Aguallueve
El Aguallueve no es solo un lugar para admirar, sino también un destino ideal para los amantes del senderismo. El recorrido circular de 2,5 kilómetros que rodea el manantial es perfecto para disfrutar de un día de caminata en plena naturaleza.
El sendero es apto para todas las edades, lo que lo convierte en una actividad ideal para toda la familia. A lo largo del camino, los visitantes pueden apreciar los contrastes de colores del paisaje, desde el verde de la vegetación hasta los tonos rojizos de la tierra, pasando por el gris de las rocas calizas.
El recorrido también permite acceder al castillo medieval de Anento, ubicado en una pequeña colina. Aunque en ruinas, el castillo ofrece vistas panorámicas espectaculares del valle y de todo el municipio, lo que lo convierte en otro de los puntos imperdibles de la ruta.
Patrimonio histórico de Anento
Más allá de su naturaleza, Anento cuenta con un valioso patrimonio histórico que merece ser explorado. Uno de los lugares más destacados es la Iglesia de San Blas, una construcción románica del siglo XIII que alberga un magnífico retablo gótico. Este lugar es un excelente ejemplo de la arquitectura religiosa medieval, y su belleza es suficiente para dejar sin aliento a los visitantes.
Además, el castillo medieval de Anento, aunque en ruinas, es un testimonio de la historia del pueblo. Desde lo alto de su torre, los visitantes pueden disfrutar de unas vistas espectaculares de la comarca del Campo de Daroca y los alrededores de Anento.
Calles del pueblo medieval de Anento, Zaragoza.
También destacan las migas aragonesas, un delicioso plato de pan duro, ajo, aceite de oliva y embutidos como chorizo o panceta. Los guisos de caza, como el jabalí o el conejo, son otra de las delicias que los visitantes pueden disfrutar en los restaurantes locales. Además, los embutidos como la longaniza de Aragón y otros productos artesanales completan la oferta gastronómica de la localidad, haciendo que la visita no sea un deleite para los ojos, pero también para el paladar.
¿Cómo llegar a Anento?
Anento está ubicado a tan solo una hora en coche de Zaragoza, lo que lo convierte en un destino perfecto para una escapada de fin de semana. Para llegar, basta con tomar la A-23 en dirección a Teruel, y luego seguir las indicaciones hacia Anento. El trayecto es sencillo y, al ser un pueblo pequeño, es fácil aparcar en las zonas habilitadas.
No cabe duda de que este, es el lugar ideal para aquellos que buscan desconectar del estrés diario y sumergirse en un entorno natural y cultural único. Su belleza medieval, combinada con el espectacular manantial del Aguallueve, lo convierte en uno de los destinos más especiales de Aragón.
